El escritor mexicano Alfonso Reyes (1889-1959) acuñó el
término ancilar en "El deslinde. Apuntes para la teoría
literaria" cuando distingue entre “literatura en pureza” y “literatura
ancilar”. En general, la “literatura en pureza” enfatiza más lo artístico
de la palabra y “la literatura ancilar” incluye más otros elementos de otras
disciplinas del conocimiento humano, tales como la historia, la sociología, la
economía y otros más. Por eso, el ensayo es uno de los géneros “ancilares” o “auxiliares”
para Reyes.
Fábula.-
Narración corta en prosa o en verso de carácter didáctico, cuyos protagonistas
suelen ser animales y terminada por una moraleja que recoge la lección moral: “El
lobo y el cordero”. (Fedro).
Exiemplo.-
Cuento de carácter moralizante. Se empleó mucho en la época medieval. “Exiemplo
de la raposa y del cuervo”. (Arcipreste de Hita).
Apólogo.- Cuento de carácter moralizante. ( El exiemplo
está más cerca de la fábula; el apólogo, del cuento). “El Conde Lucanor”. ( D. Juan Manuel).
Epístola.- Expone
un tema en prosa o en verso, de carácter general y en forma de carta. “
Epístola moral a Fabio”. (Fernández de Andrada).
Ensayo.- Consiste
en la exposición aguda y original de un tema científico, en prosa, y de forma
que esté al alcance del lector que no posee conocimientos técnicos especiales. “El
espectador”. (Ortega y Gasset).
B) HISTORIA
Crónica.- Relato de reinados particulares o
sucesos concretos. “Crónica General”. (Alfonso X El Sabio).
Biografía.- Relación de la vida de un personaje.
Autobiografía.- Relación de la vida por el mismo
personaje. “Autobiografía”. (Santa Teresa de Jesús).
Memorias.- Relación de hechos vividos o
presenciados por el escritor. “Memorias de un setentón” (Mesonero R.)
C) ORATORIA.- Trata sobre la elocuencia o la facilidad de hablar.